Como todos sabéis y así manifesté en el escrito de presentación de este blog, mi Palacio se compone de varias estancias que tratan de recoger todo lo bello que hay en este mundo y en cuyo jardín me gusta perderme. Pero la actualidad manda y hoy mi Palacio anda revolucionado. Mi intención de permanecer en su interior, tratar de hacer caso omiso de la cruel realidad y perderme en mi mundo, se ha visto desbordada por la actualidad.
Justamente hoy, se cumple una semana del barbarie asesinato de doce de los colaboradores del semanario francés "Charlie Hebdo". Nacida en París y amante de todo lo francés, me uno al dolor de los familiares de las víctimas y de todos los ciudadanos de bien que lo único que buscamos es vivir en paz en un mundo civilizado.
Viendo las noticias, me he quedado estupefacta al ver a cientos de franceses haciendo cola desde la madrugada para conseguir el último número del semanario francés...y si eso no era poco, han anunciado que estará también disponible en España desde el próximo sábado.
Uniéndome, como ya he manifestado, al dolor de las víctimas y de toda la sociedad, quiero dejar claro que no formo parte del coro de grillos ni del rebaño que desde hace una semana se ha unido al lema "Je suis Charlie" para mostrar su solidaridad con las víctimas de una atrocidad.
Yo no soy Charlie, no lo he sido, no lo soy y nunca lo seré. No puedo estar con personas que están tan alejadas de Dios...porque ,no olvidemos que, ese semanario ha faltado al respeto en muchas ocasiones a la religión cristiana que forma parte de los cimientos de nuestra Europa. Nunca estaré con una publicación que tiene el mal gusto de ofender las creencias de los demás a través de unas caricaturas que traspasan el límite de lo respetable y atacan los sentimientos de millones de personas entre las cuales me incluyo.
¿Qué sucede en Europa, qué pasa para que hayamos perdido el norte de esta manera, cuándo comenzó esta debacle en la que gran parte de los europeos atacan sus raíces, sus orígenes sin ningún tipo de límite? ¿Es progreso ofender a propios y ajenos?
En mi modesta opinión, se trata de una guerra entre dos diablos: unos asesinos por un lado y un semanario satánico por otro. En resumen una guerra entre personas alejadas de Dios, del respeto y del buen gusto.
La libertad de expresión es un derecho que a todos debe asistirnos, pero no nos da derecho a ofender.
Unos reclaman libertad de expresión....Yo reclamo mi derecho a ser respetada y al buen gusto.
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